¡Ranking de las 5 navidades más blancas que se recuerdan en España!
Marcos Fernández Fernández
22/12/201715:42 h.Navidad de 1996- 1997: Madrid se vistió de blanco
Veníamos de un año en el que nos recuperábamos de una grave sequía, ¿os resulta familiar? El mes de diciembre había sido especialmente lluvioso y con temperaturas constantemente a la baja. Sin embargo, los primeros días de Navidad no fueron en especial ni fríos ni húmedos. Pero, en torno al 28 de diciembre las temperaturas se desplomaron y se generalizó una situación de nevadas en todo el país, que duró hasta el 7 de enero.
*Foto de Javier Urbón: El Puerto de Navacerrada (Madrid) desapareció literalmente bajo la nieve
Por poner un ejemplo, en Madrid pasamos del aguanieve mezclada con algunos copos el Día de los Santos Inocentes a un amanecer con ventisca el mismísimo 31 de diciembre. Hasta 10 centímetros de nieve se acumularon a pocos kilómetros del centro.
La Navidad nos tenía guardada una grata sorpresa. Tras un paréntesis de días fríos y soleados con máximas muy bajas, el día 5 de enero nevó sin tregua en todo el centro peninsular. Por primera vez en la historia, la cabalgata de Reyes tuvo que modificar su trazado a causa de la nieve que impedía la celebración normal de la llegada de SSMM.
Navidad de 2004: la gran nevada de Burgos
Impresionante la nevada de aquel año, junto al caos que provocó en las comunicaciones de toda la meseta norte. Burgos todavía recuerda la cantidad de nieve que cayó sin tregua en la ciudad, ya de por sí habituada a las grandes nevadas.
Probablemente, la de aquella Navidad sea una de las que más se recuerden ya que en el centro burgalés se llegaron a medir entre 50 y 60 cm de nieve. En algunos puntos a las afueras de la ciudad, el espesor de la nieve se aproximó a un metro.
*Foto de meteoburgos: Burgos enterrada bajo la nieve el 27 de diciembre de 2004
Miles de coches quedaron atrapados en la AP-1 y en la A-1 en plena celebración de la Navidad, ya que la nieve comenzó a caer el 25 y durante el 26 azotó con intensidad y sin tregua a buena parte del extremo norte peninsular.
La nortada de aquella Navidad empujó un importante flujo marítimo que se transformó en humedad y en precipitaciones que se mantuvieron durante días aislando Burgos de otros puntos de la meseta.
Navidad de 1962- Barcelona incomunicada
La gran nevada de la capital catalana, que ha vivido episodios de nieve históricos dignos de mención. La situación orográfica de la ciudad en condiciones favorables permite que caigan paquetones de nieve como el de aquel año en el que la ciudad condal quedó aislada durante varios días.
Como la ciudad no disponía de máquinas quitanieves, esto complicó la situación de caos hasta que los operarios consiguieron desplazarse en estos vehículos desde los Pirineos para alcanzar la capital catalana.
*Foto BERT/archivo: Plaza de Tetuán (Barcelona) totalmente cubierta de blanco el día de Navidad de 1962
Y es que la ciudad quedó enterrada en medio metro de nieve, que cayó el 25 de diciembre en plena celebración de Navidad. En algunos puntos se reportaron hasta 80 centímetros. Como anécdota cabe citar la nevada ligera que cayó al día siguiente en Madrid acumulándose cinco centímetros que no tardaron en retirarse a las pocas horas, ya de madrugada, con una subida de temperaturas que impidió que la nieve dejará estampas blancas en la capital.
Navidad de 1926: el Levante vivió una histórica Blanca Navidad
Hace casi un siglo de aquella histórica y excepcional nevada que cubrió de blanco la provincia de Alicante y numerosos puntos de Murcia y Andalucía. Algunos de ellos se situaban a pie de costa.
Poco habituados a la nieve, entre el 25 y el 27 de diciembre de 1926 asistieron atónitos a una inmensa marea de copos blancos que tiñó de un paisaje navideño localidades como Cartagena, Torrevieja, Málaga o la localidad costera de Sanlúcar de Barrameda.
*Foto de Lluís Francés: Nevada en Sax (Alicante) el 26 de diciembre de 1926
Los espesores de la nieve fueron históricos llegando a medirse hasta dos metros de nieve en el interior de Murcia y de Alicante. Entre ambos se concentró el grueso de la gran nevada, que en 36 horas dejó un paisaje que hasta hoy no se ha vuelto a repetir nunca más.
Navidad de 2001 – Nieve por toda España
Esta última nevada merece estar en el ránking de grandes nevadas por la extensión geográfica ya que afectó ampliamente a toda la Península antes o después del 23 de diciembre. Lo curioso de aquella situación fue el frío extremo con el que arrancó ese mes. Se midieron mínimas cercanas a las -10 en Madrid, que recibió la gran nevada desde la madrugada y hasta bien entrada la tarde del 23 de diciembre.
Cuando se retiró la precipitación de nieve, el frío se instaló en el interior de la Península con mínimas y máximas muy bajas lo cual permitió, por ejemplo, que la nieve cuajada durará todas las fiestas incluso en barrios de la capital.
En esta ocasión, la nieve afectó con especial virulencia la meseta sur, menos acostumbrada a estos episodios. Mientras, a principios de mes cayó con fuerza en puntos del extremo norte y en Cataluña donde el temporal fue histórico ya que nevó en las cuatro capitales.