La 'nieve' de agosto en Navarra: te contamos el fenómeno de las efímeras

Es una de las órdenes de insectos alados más antiguos que se conocen, pero poco sabemos de los efemerópteros (Ephemeroptera). Blandas y frágiles, las efímeras tienen cabeza pequeña, antenas cortas y grandes ojos compuestos (no tienen una lente central). Poseen la particularidad de que, cuando llegan a la edad adulta, las efímeras no comen. Te explicamos por qué.

Es en los últimos días de agosto cuando las efímeras comienzan su época de reproducción. Tras haber estado año bajo el agua un año, después, cuando mudan a su etapa adulta salen a la superficie, primero a la orilla del río hasta que su cuerpo se hace fuerte, y después, en una segunda fase, echan a volar para aparearse.

Aunque se desconoce por qué todas las ninfas sincronizan su emergencia, lo cierto es que es una estrategia de defensa ante posibles depredadores.

Parece que tienen prisa. Las efímeras, cuando están reproduciéndose, solo se centran en poner los huevos. Tras hacer la metamorfosis en el agua, las efímeras vuelan hacia la superficie con la misión de reproducirse y morir. Emergen al atardecer y por la mañana han muerto.

Aunque su época como ninfas se puede alargar hasta un año, la etapa como adultos de las efímeras no dura más de 24 horas. Así son ellas, efímeras.

Como más de 3.000 especies conocidas que habitan todas las regiones biogeográficas (excepto la Antártida), Ephemeroptera es una de las órdenes más antiguas de insectos alados.

No es fácil ver una efímera. Nacen en lugares húmedos, como cursos de agua, lagos, lagunas, y balsas. Teniendo en cuenta que su época de adultas no dura más de un día, es lógico pensar que, al echar a volar, no estarán muy lejos de estos lugares. Además, se sabe que son unas voladoras nefastas.

Sí, un año creciendo para luego llegar a la vida adulta, reproducirse, poner los huevos corriendo y terminar muriendo en los estanques. Qué melancólico y triste.

Si se te ocurre pasearte por el río Ebro en plena fase reproductiva (con el consiguiente cúmulo blanco), no te preocupes: ni te van a picar, ni te van a atacar, ni nada. De hecho, no solo son absolutamente inofensivas para las personas sino que también lo son para la agricultura y el resto de animales. No se alimentan de los cultivos, sino de restos vegetales y algas. Son básicamente herbívoras.

Si no molestan, no están en todas partes y tampoco comen cultivos, ¿qué pega tienen estos animales? Al parecer, todo son ventajas. Su presencia en los lagos indica su buena calidad, por lo que también son grandes "indicadores ecológicos", así como una fuente importante de alimento para peces y otros animales acuáticos. Además, los pescadores utilizan a menudo las efímeras como cebo.