Alerta pesca: algunas especies como el pulpo están ya en peligro por el cambio climático
Cristina Abel
08/12/201816:28 h.Las consecuencias tienen que ver con los cambios de temperatura del agua, los niveles de pH y los patrones de circulación oceánica, además del aumento del nivel del mar y los cambios de precipitaciones que está afectando ya a los procesos migratorios marinos. Javier Garat, uno de los mayores expertos de pesca en España, constata estas consecuencias y nos cuenta qué se está haciendo para paliar esta situación.
Caída en la producción primaria
El último informe de la FAO sobre El estado mundial de la pesca y la acuicultura es elocuente. Basado en el Quinto estudio de evaluación del grupo intergubernamental de expertos sobre el cambio climático (IPCC), esta memoria advierte que una serie de especies marinas han desplazado sus distribuciones hacia los polos y aguas más profundas.
"Se prevé que la producción primaria de los océanos del mundo, de la que dependen la red alimentaria marina y, en última instancia, el pescado, disminuirá en un 66% para 2100 y en un 11% en las zonas tropicales", señalan. Y no solo hay preocupación por los cambios de movilidad de las especies, también por el aumento de la absorción de dióxido de carbono, que se traduce en una mayor acidez del agua.
Cambios en los procesos migratorios
"La temperatura del agua está aumentando y las especies que estaban acostumbradas a ciertas condiciones están buscando su hábitat en otras zonas más al norte. Eso lo hemos visto en especies como la merluza y el atún rojo", señala Javier Garat, presidente de la Coalición Internacional de Asociaciones Pesqueras.
"En aguas de Noruega e Islandia han vuelto especies que estaban desaparecidas desde hace más de medio siglo", añade el secretario general de la Confederación Española de Pesca (Cepesca) y presidente de Europeche.
Situación en España
España no es ajena a los efectos del cambio climático y un ejemplo de especie amenazada podría ser el pulpo, cuya presencia en aguas gallegas ha caído estrepitosamente. En estos momentos, Galicia importa 20 veces más pulpo (21.500 toneladas) del que captura para poder mantener la demanda de este producto. "Los propios científicos consideran que esta escasez podría deberse a cuestiones climáticas y medioambientales", indica Garat.
Incumplimiento de cuotas de captura
Asimismo, Garat advierte que el cambio de las rutas migratorias de algunas especies también están provocando disputas a la hora de gestionar la pesca, como sucedió hace unos años con la caballa y la decisión de islas Feroe de triplicar su cuota de captura al margen del acuerdo con la Unión Europea, una situación que provocó un conflicto internacional, además sanciones comerciales que el archipiélago danés desoyó, ya que vendió en otros mercados.
Sostenibilidad biológica, social y económica
Para paliar los efectos del calentamiento global, además de un cambio de mentalidad de los armadores, que ya es evidente según Garat, se debe apostar por equilibrio de la sostenibilidad en sus tres dimensiones (biológica, social y económica.
"En la mayoría de poblaciones del Atlántico, se está aplicando el rendimiento máximo sostenible, que es el objetivo que se impone la UE", indica el experto, un reto por el que se deben maximizar las practicas pesqueras sostenibles para la mayoría de las especies en 2020.
Concienciación en el sector
En el ámbito pesquero hay una enorme concienciación por preservar el futuro de los fondos marinos y no solo se lleva a la práctica cumpliendo con las normativas vigentes en cuanto a vedas y épocas de captura para preservar a las especies, también apostando por aquellas tecnologías que contribuyen a una "flota más eficiente desde el punto de vista energético", apunta Garat.
"En la pesca de túnidos, se ha desarrollado una técnica con dispositivos de concentración de peces, DGPS, que permite localizar el cardumen y, por lo tanto, se ahorran horas de viaje y resultan menos contaminantes al generar menos CO2", comenta el experto para el que también es importante la toma de conciencia del consumidor. "Se debe apostar por un comercio responsable y si se tienen sospechas de la venta de pesca ilegal, o de la presencia de algún fraude, el consumidor debe reaccionar", concluye.