Nube embudo: cinco cosas que debes hacer para sobrevivir si te encuentras con un tornado

Una columna de aire con alta velocidad (400 kilómetros/hora de media) cuya base inferior contacta con la superficie de la tierra y la superior, con un cumulonimbus, es lo que se conoce como tornado. Se encuentra entre los fenómenos atmosféricos de mayor potencia energética que existen, además de corta duración temporada y, normalmente, escasa extensión de recorrido, salvo en los casos más agresivos como los que suelen producirse en Estados Unidos.

De las rocosas a Uruguay

Al otro lado del charco, los tornados suelen acabar con la vida de entre 80 y 1.500 personas anuales, sobre todo en Tornado Alley, una zona al este del país, entre las montoñas rocosas y los montes Apalaches, que incluye Kansas, Oklahoma, Nebraska, Dakota del Sur, Texas y Colorado.

Asimismo, la totalidad del territorio que comprende Uruguay se conoce como el Pasillo de los Tornados, donde chocan el aire frío de la Antártida y la Patagonia y el aire caliente y húmedo de Brasil. El 21 de abril de 1970, en la ciudad Fray Marcos, se produjo el tornado más virulento y mortífero de la historia del país, de categoría F4 y una trayectoria de 18 kilómetros de largo y 250 de ancho, que dejó 11 muertos a su paso.

Escalas de medición

Las distintas escalas que clasifican estas nubes embudos lo hacen en función de su fuerza o del daño que causan. Fujita-Pearson es la más conocida, se utiliza desde 1971 y se mide la destrucción que ocasionan en las edificaciones. Consta de seis intensidades (en realidad eran 13 en origen), que van de la más leve, F0, a la destructiva, F6, de daños inconcebibles y que solo se ha registrado en una ocasión, 1999, en Oklahoma, con vientos que superaron los 500 km/h . La segunda medida más conocida es Torro, una clasificación en función de su fuerza, siendo la 0 la más débil y 11, la más fuerte.

Tornadogénesis

Suelen formarse (tornadogénesis) cuando los cambios en la velocidad y la dirección de una tormenta generan un cono vertical que se debe al ascenso del aire dentro de una tormenta. Son especialmente frecuentes tras una tormenta eléctrica y el granizo es uno de los meteoros más comunes que los acompañan. En realidad son transparentes, lo que vemos son las gotas en suspensión, el aire húmedo y los restos y polvo que levantan del suelo. Como anécdota, son más comunes en horario vespertino, cuando la superficie acumula más calor, y en los meses de primavera y verano.

Pistas para su predicción

Los meteorólogos tienen poco margen para su pronóstico, alrededor de unos 13 minutos, por lo que las autoridades tienen escaso margen para prevenir a la ciudadanía, aunque hay ciertas pistas que pueden darnos una pista como una granizada copiosa, la oscuridad del cielo y un sonido muy peculiar que alguno comparan con una aspiradora gigante, un silbido o un tren en un túnel. Un estudio de la Universidad Estatal de Oklahoma, hecho oficial en la Acoustical Society of America, reveló que los infrasonidos que generan las tormentas severas pueden ayudar a los meteorólogos a predecir su llegada.

Busca refugio subterráneo

En ocasionesm se pueden llevar a cabo una serie de medidas para sobrevivir en caso de que te veas sorprendido por uno. Nada más avistarlo, debes localizar un habitáculo subterráneo como un sótano o la estancia más interna del edificio, allí donde no haya ventanas, para que las posibilidades de supervivencia sean mayores. Estancias así han salvados miles de vidas allí donde son más habituales.

Aléjate del coche

Los conductores deben alejar sus vehículos de la posible zona de desplazamiento del tornado y buscar un refugio seguro, ya que los coches están entre los escombros más habituales que suelen absorber este tipo de fenómenos.

Busca una zanja profunda

En caso de no poder refugiarse en un sótano y encontrarse en el exterior, los expertos recomiendan hacerlo en la parte más baja de una zanja.

Cierra ventanas y evita lugares elevados

Es un error pensar que al abrir las ventanas estamos minimizando el daño en las edificaciones porque precisamente sucede todo lo contrario. Los lugares elevados tampoco son la mejor opción, sino que se convierten en uno de los más peligrosos.

Escaleras, muebles y escaleras abajo

Además, esconderse debajo de una escalera o de una mesa o mueble muy resistente aumentarán nuestras probabilidades de sobrevivir. Nada de ascensores es mejor buscar las escaleras en busca de la planta baja o del parking.