Mala suerte o buena ciencia: ¿Por qué el tiempo empeora los fines de semana?
Marcos Fernández* IMeteoraliaI (@marcosfdezfdez)
13/01/201717:10 h.Lo más probable es que no sepas que no es tanto cuestión del azar como que, en realidad, hay una mayor probabilidad a que las nubes cubran los cielos de tu ciudad los fines de semana.
La contaminación está detrás de esta curiosa teoría que ha sido llevada a cabo en diferentes momentos y en universidades distintas. Uno de los centros que lo han corroborado ha sido la Universidad de Barcelona basándose en datos meteorológicos desde 1961 a 2004 y en función de los cuales han determinado ciclos semanales de lluvia. A la misma conclusión llegaron al otro lado del Atlántico, en la Universidad de Arizona (Estados Unidos). En este caso, analizaron las lluvias en la fachada atlántica estadounidense desde 1979 hasta 1995. Concluyeron que los sábados son un 22% más lluviosos.
Y es que la contaminación que generamos cada día en las ciudades afecta directamente a las condiciones meteorológicas, por lo que somos responsables de estos patrones de lluvia. De lunes a viernes, por regla general, al ser días laborables la atmósfera se llena de partículas contaminantes en suspensión que absorben la luz solar, calientan el aire y alteran el régimen de vientos. Esta cadena de factores acaba dando lugar a la formación nubes. Y al finalizar la actividad laboral los viernes y disminuir los niveles de ozono y monóxido de carbono, el choque de una corriente de aire frío con esa boina de contaminación puede dar lugar a un incremento de la inestabilidad y la formación de las gotas de agua de lluvia Esto se traduce en fines de semana lluviosos.
Al llegar de nuevo el lunes, la semana se estrenaría con una atmósfera limpia de contaminación y volvería a comenzar el ciclo acumulándose sobre nosotros esas particulares contaminantes llamadas aerosoles hasta el fin de semana.
Sin embargo, los científicos no se ponen del todo de acuerdo en esta teoría. En primer lugar, no es una regla de tres, pero sí marca una tendencia que se viene observando con el aumento de la dependencia de los combustibles fósiles (contaminantes). Además, hay lugares del planeta más sensibles a la contaminación y sus efectos en la Meteorología, por ejemplo, la cuenca del Mediterráneo frente a las islas británicas donde los investigadores no encuentran una relación clara entre los periodos más soleados y los más lluviosos.
Probablemente, este punto tenga que ver con la exposición de algunas partes del continente europeo, como Gran Bretaña, Islandia o las costas atlánticas a la influencias de las corrientes que circulan por el océano. Frente a esta situación, la opuesta sería la del Mediterráneo, más protegido y vulnerable a factores humanos: la actividad industrial, el tráfico de vehículo, etc.
Quienes más lo han estudiado son científicos finlandeses, que recogieron datos de más de 200 estaciones meteorológicas de Estados Unidos desde 1951 hasta 2002. No consiguieron determinar que sábados y domingos fueran pasados por agua en su mayoría, pero sí confirmaron que a partir de la década de los 80 las lluvias incrementaron su intensidad y frecuencia. Y este dato coincide con el aumento notable de la actividad industrial.
Como estudio científico no deja de ser curioso para hacernos reflexionar. Sin embargo, estas teorías no podrían aplicarse al entorno rural. Eso sí, si no quieres que tus fines de semana estén pasados por agua puedes contribuir a contaminar menos la atmósfera de tu ciudad o bien pasar el sábado y/o el domingo en el campo.
*Marcos Fernández (@marcosfdezfdez) es periodista especializado en Meteorología.