El cuerpo es sabio: por qué tiemblas cuando hace frío

eltiempohoy.es
09/04/201915:37 h.Si tus planes para la Semana Santa incluyen esquiar o viajar a un país nórdico lo más seguro es que, tarde o temprano, pases frío. Tu cuerpo te defiende de la muerte en más ocasiones de las que piensas y aguantar las bajas temperaturas, en ocasiones durante horas hasta que encuentras dónde meterte, es una de las amenazas más notables para él. ¿Cómo lo hace? Temblando. Pero ¿por qué temblamos exactamente?
Sales a la calle y, pasados unos minutos a la intemperie, empiezas a temblar. ¿Qué ha pasado? Tu piel detecta la temperatura ambiental mediante receptores y se chiva al cerebro, concretamente a una glándula del mismo, el hipotálamo posterior, que se pone alerta y envía a tu cuerpo la señal para que entre en acción. Esa acción es tu particular baile de 'San Vito'.
Mecanismo de defensa
El termostato interno que todos llevamos es el hipotálamo que, como decimos, envía la señal al cuerpo para aguantar el frío el máximo tiempo posible, ya que los órganos necesitan mantener el calor para poder llevar a cabo las funciones vitales. A continuación, los vasos sanguíneos se contraen y se produce lo que se llama vasoconstricción. Así, el cuerpo dosifica el calor: envía menos sangre a las extremidades –por eso se te enfrían antes las manos y los pies– y la emplea en lo importante, en los órganos.
Castañean los dientes
Pero también tus extremidades entran en alerta con el frío y ante la pérdida rápida de calor, tiritas, incluida tu mandíbula, por eso te castañean los dientes. Tu cuerpo conoce mejor que tú lo que necesitas, por eso contrae los músculos y los relaja y, así, transmite calor principalmente a las extremidades aunque también al resto del cuerpo.
Dato extra
Cuando temblamos producimos una hormona llamada irisina, que genera calor. Es la misma hormona que liberas cuando haces ejercicio… y quema grasa. Por eso se dice que hacer ejercicio con frío quema más calorías.